Con los padres vestidos con sus mejores galas dominicales y el bebé con una bata blanca, ¡debe ser el día en que el pequeño sea bañado en aguas benditas!
Esta figura, que marca una entrada oficial a la amorosa familia de Dios, conmemora maravillosamente el bautismo especial, el bautizo o el día de dedicación de un bebé.
Un recuerdo muy especial de un día tan sagrado, esta figura seguramente se exhibirá en un lugar de honor.
Esta figura, que mide aproximadamente 5,5 pulgadas de alto, está meticulosamente esculpida en fina porcelana bisque y pintada a mano por expertos.
